!Este año por motivos de salud familiares, estoy faltando a las clases de patchwork con Inmaculada Navarro, pero no me puedo quedar quieta y ratito que tengo libre pues procuro hacer algo de patchwork, como no hay que desplazarse, me he apuntado a los sales de Isi, la colcha de la familia, la colcha del amor de henrietta Whiskers y ahora a un sal que nos ha propuesto Ana Orduña, Así que aunque físicamente no pudiera estar donde quisiera, pues aquí desde casa vamos cosiendo poco a poco, y así no desconecto del patchwork ( es una de mis pasiones bueno más bien un vicio) aunque este no es nocivo para la salud, al contrario yo creo que es bueno pues mantienes la mente despierta mientras planificas la labor,te relajas mientras vas uniendo las piezas, te alegras cuando lo terminas, cuando lo regalas, cuando lo pones encima de la cama, colgado en la pared etc. en fin que aunque sea un vicio es de los buenos.